Rincon de Charlie en Con-Con - fds Colapsado
Anticipando el verano, con la correspondiente saturación de balnearios y ciudades costeras, los fines de semana Reñaca y Con-Cón se llenan de capitalinos y otros visitantes.
Buscando un lugar para almorzar en Con-Con, intentamos el Emeterio, pero había que anotarse en lista para una espera de mínimo media hora, según el encargado.
Optamos por conocer el Rincón de Charlie justo al lado, pues encontramos una mesa desocupada...
Mientras esperábamos que limpiaran la mesa y tomaran el pedido, notamos la molestia de varios comensales de mesas vecinas. Los 5 ó 6 mozos eran apoyados en la toma de pedidos por 2 señoras que al parecer también veían la caja. Los mozos le hacían el quite a limpiar las mesas, para dar preferencia a atender las mesas ya limpias y asegurar propinas. Llegó una familia que se sentó a una mesa y luego de 20 minutos el padre fue a alegar porque aún ni siquiera se la habían limpiado. Luego de otra mesa se pararon reclamando que habían esperado 1 hora y cuarto por lo que se iban y no pensaban pagar el consumo de unas bebidas que era lo único que les habían servido. Finalmente llegó un mozo con una orden de varios platos para otra mesa de la que los comensales se habían ido sin siquiera avisar. El mozo alegando a los clientes de otras mesas por los clientes que se habían retirado (!)... en fin un caos.
Nos atendimos solos tomando una carta de una mesa contigua y seleccionamos los platos que íbamos a pedir. Primera impresión: los precios de los platos de pescados no parecían de picada. Salmón, Reineta, Congrio y Albacora, todos desde $7.000 en su preparación básica frito, apanado o a la plancha ($7.500 con queso, $8.000 con salsa de camarones, etc.). Al menos incluían acompañamiento, y no eran precisamente para tímidos: sólo con la "entrada" (segun carta) de mariscal caliente ($4.500) quedé out y tuve que pedir el fondo albacora apanada con papas mayo ($7.000) para llevar. Idem mi acompañante luego de una no-tan-grande empanada frita de jaiba-queso ($1.300) alcanzó a consumir casi la mitad del congrio frito con ensalada de tomates ($7.000). Más las 2 bebidas por $1.300 c/u, sumamos una cuenta de $22.400. Ojo: los platos bajos de las fotos son grandes (tipo lengua).
Comparativamente, por el precio alcanzaba por ejemplo para almorzar en uno de los restaurants del Casino de Viña o en el Pasta e Vino de Valparaíso, pero las porciones del Charlie eran bastante abundantes (dobles).
De los platos lo más rescatable fue el mariscal caliente, servido en plato de greda, con choritos, camarones, ostiones, almejas, machas y un loco entero encima, aunque no para entrada sino más bien para fondo. También había un mariscal especial ("Charlie") sólo de camarones, ostiones, machas y loco ($7.000).
De la atención, si intentas ir un fin de semana, más te vale ir con muuuucha paciencia.
Anterior: Pasta e Vino Próximo: Hamburg