Valpo, Temuco y Pucón.
Estimadísimos:
Este 1 de enero de 2010 me lo salto, porque ni siquiera pude probar alguna de las recetas para la recuperación...no se me juntó el alma con el cuerpo como hasta las 9 de la noche....y de ahí, sólo consumí Ginger Ale y una sopita de caracolitos de sobre. No tomo nunca más ! ( al menos, hasta el sábado en el Intercomunal).
El 2 de enero partimos al Journal de Valpo, en el Barrio Puerto. Hace un par de meses había ido y me había comido una empanada de ostión queso de esas que uno recomienda...rica y llena de ostiones, con la masa delgadita y cero aceitosa. También había probado unas calugas de merluza buenísimas. Y además tenían schop muy helado, lo que es trascendental.
Así que, para celebrar el primer sábado del año ( y con un hambre bicentenaria) pedimos las recordadas empanadas, mas nos encontramos con unas empanadotas con masa gruesa, pero grotescamente gruesa, tanto que por dentro no se había alcanzado a cocer y el queso no se había derretido. Eso sí, tenía como 6 ostiones gigantes que, por chiripa, estaban cocidos a punto. Ricos los ostiones. Pésima la empanada. Luego, porfiamos como burros, y pedimos un ceviche Journal, que traía pescado blanco y mariscos ( 8.000 aprox) . Llegó un cerro que constaba de lo siguiente: muchos ostiones chicos, camaroncitos, y un montón de pescado blanco desarmado que había sido remojado en limón al menos desde el 2009. Todo revuelto y muy aliñado con harta sal y ají; me da la impresión que era para "tapar" lo rancio del pescado. Mal. Y lo peor: al lado traía, como de yapa, un poco de tiradito de salmón, con salmón descompuesto (hediondo) . Y al lado, choclos grandes peruanos...avinagrados. Todo mal. Lo tuvimos que devolver e irnos.
En la mesa de al lado había un señor joven que también alegaba mucho y por razones parecidas. Era bien jodido y casi ladraba, pero tenía la razón. Casi lo saludo para preguntarle si era Germán. (Eras tú?)
Luego, nos fuimos al mercado Cardonal para otro ensarte que me da lata detallar. Qué rabia. Moraleja: en Valpo, un 2 de enero, es mejor comprar los mariscos y cocinarlos uno. Pero pareciera que uno nunca aprende...
Y ahora cambiando radicalmente de tema y de zona: me tuve que ir por pega ( mi esperado debut en el mundo laboral formal) al sur: Temuco y Pucón. El viático debe ser uno de los mejores inventos del ser humano.
De cuatro ocasiones, dos son dignas de recordar, y de recomendar:
En Temuco, el Madonna ( Alemania 0660, casi frente al Portal Temuco) . Allí tienen pizzas y pastas. Fui en la noche y me comí una pizza individual que en realidad era media familiar. Igual, como soy buena y quiero que el viejito pascuero el otro año me considere con especial atención ( y además porque no había almorzado) , me la comí toda. Tenía tocino y champiñones, y mozzarela de verdad. En realidad, estaba perfecta. La masa delgada pero existente, y bien crujiente. Pedí una copa de vino y llegó un copón de vino.... no me quejo. La atención excelente y rápida. Incluso, cuando iba en la mitad, llegó un garzón a preguntar si quería que me volvieran a calentar lo que quedaba de la pizza. Eso no se ve en Santiago.
No saqué foto porque me dio vergüenza.( no les pasa?)
En Pucón, el Beanies & Bikinis (Fresia 477) . Pedí un schop Kunstmann que estaba gloriosamente frío, y una hamburguesa Gringo ($3.500) que en la carta decía "votada como la mejor hamburguesa de todo Pucón". La sirven abierta y tiene queso, cebolla frita, pepinillos, tomate, palta, lechuga y viene con unas poquitas papas fritas. No creo que haya sido la mejor, pero estaba bien buena. Todos los ingredientes frescos y abundantes, pero la hamburguesa misma era chica para el tamaño del pan y estaba un poco seca. Tenían ketchup del rico y mayo casera, y la atención bien atenta.
Es un local medio "ondero" así como para el lolo con onda y el gringo outdoor, y también venden ropa top. Recomendable, pero pidan la hamburguesa no tan cocida. De todas maneras, tenían otros sándwichs que se leían ricos.
Como estaba sola en la terraza, no tuve problemas en sacar la foto:
(la de la foto no tiene queso)
Después me subí al bus con la guatita llena y el corazón contento, y dormí profundamente hasta Santiago.
Saludos a todos y que tengan un lindo 2010, lleno de satisfacciones personales, laborales y hedonistas.