Antes de la lluvia (En Caldera y Bahía Inglesa)
Cuando estaba en Santiago el sueño del pibe era mandarse a cambiar por el fin de semana a una playa cálida y desierta. Bueno, ahora estaba a 1 hora así que no me quedó otra que irme en este viaje un tanto autista.
El viernes partí a Bahía Inglesa, sola mi alma, a descansar de los estreses copiapinos laborales. Me recibió un atardecer con pinta de que pasado mañana va a llover. Maravilloso.
Me senté en una roca con una Paceña heladita a mirar irse el sol y se fueron con él todos los problemas. Al menos por dos días, que era lo que necesitaba ( a veces dan ganas de ser estudiante otra vez).
Más tarde, fui a Plateao. A las siete de la tarde, éramos tres mesas y tres garzones, y nadie me fue a atender en 20 minutos. Mis neuronas, felizmente aletargadas por los efectos del mes de abril, ni se dieron cuenta, hasta que me dije a mí misma: Bah! si me vine a tomar una chela! Así que me paré a preguntar qué pasaba. Un púber me dijo voy altiro, y vino pero sin la carta. Se la pedí y se devolvió a buscarla y finalmente pude pedir mi anhelada cervecita (Heineken, a $2000). Los platos eran más caros (entre 7.000 y 8.000), pero se leían buenos. Me han contado que de hecho, son excelentes y muy abundantes, casi para dos. Pero siempre con el problema de la atención lenta.
Me terminé de desestresar frente a la playa, en Plateao, cuya máxima virtud es su terraza con sillones blanditos, a 30 metros del mar. Aún sin frío, sin lluvia, sin viento, escuchando las conversaciones de dos mineros recién pagados, un artista cuarentón santiaguino teñido rubio que decía grosso a cada rato y dos niñas también de la minería que querían conversar con el artista pero que estaban siendo acosadas por los mineros. Igual entrete.
Después, me fui dormír ultra temprano, y alcancé a agarrar en el History Channel The History of Brewing en Maravillas Modernas. Encuentro genial que la cerveza esté considerada como una maravilla moderna. Totalmente de acuerdo.
Al otro día, tempranito, fui a caminar por la playa Las machas. No tiene machas, pero andaba un perro muy simpático (quiltro tipo “ladrador” nº399) que me acompañó.
Después, me fui a Caldera, con un antojo de erizos que me nublaba el pensamiento. Cuando llegué al Terminal Pesquero lo primero que vi fue este inmenso lenguado. Nunca había visto uno así. De hecho, lo que le cuelga como de la boca, es un lenguado normal. Y los congrios que están colgados al lado, eran congrios normales, no chicos. Estaba a 3.500 el kilo.
Abajo estaban, posando cual señorita para página social:
(de izquierda a derecha) Vieja tute o vieja rusia, Rollizo, otra Vieja tute o vieja rusia, Vieja negra.
Le pregunté dos veces a don Nino los nombres, e inmediatamente anoté para no olvidarme. Yo conocía como Rollizo a un pescado más corto y gordo, de roca también, rojo por fuera y con unas aletas y espinas bien “parafernálicas”. Pero parece que es bien común que los pescados de roca medios desconocidos, poco comerciales, vayan cambiando de nombre según la localidad (hasta ahí llegó nuestro afán de objetividad).
Después, me presentó al Payaso o Villagay (o Bilagay) . Así mismo: uno o lo otro.
En el Terminal, que en realidad es como un típico mercado de caleta típica, venden en casi todos los puestos tarritos de piures, erizos y mariscales:
Y luego, lo mejor:
Erizos fresquísimos, a $2000 el tarrito plástico que hace harto (1 porción grande), con aliños a gusto. El placer mismo. ¡Ayayay!. Si a ud. le gustan los erizos, comprenderá. Se detiene el mundo. En mi casa, de chica, cuando llegaban erizos, a la hora que fuera, todo lo que se estuviera haciendo se detenía hasta que los erizos estuvieran limpios, la cebolla y el cilantro picados y el pan tostado. Es una locura.
Después, en el famoso “Empanápolis” probé una empanada ostión-queso, como dicen en el Wikén, “correcta”. Nada del otro mundo, pero rica y con suficientes ostiones como para no alegar ($1350).
Al otro día, el domingo, en Caldera llovía a cántaros y en el terminal de buses el quiltro nº723 se preguntaba por el partido...
Saludos amigos de LBV, que tengan una linda semana!