Nos fuimos hoy lunes con mi amigo Felipe Cáceres a comernos algo a la hora de almuerzo y terminamos en el local de Cristián Warnken de la calle Mosqueto # 440, Café Mosqueto, entre Monjitas y Merced.
El local tiene unas pocas mesas en su interior y otro tanto afuera. Entrando a la derecha se encuentra una librería donde es posible instalarse a hojear los libros mientras uno se toma el café. Lo hice después de almuerzo, en un cómodo sillón, después que el que cuida el territorio llegara, pues parece, y no me extraña, si no hay un guardián, se roban los libros.
Me enteré que la librería es propiedad del conocido Cristián Warnken, el del programa de TV La Belleza de Pensar. Y, el café es de su mujer, Danitza Pablovic.
Este solo hecho ya sugiere un lugar con una atmósfera especial; efectivamente, ví mucha mujer que catalogaría de especial, con cuento, interesante, inteligente.
La verdad es que la conversación con Felipe fluyó rápida y entretenida. Nunca nos sentimos interrumpidos a pesar de que las mesas vecinas no estaban muy lejanas.
Nos comimos cada uno media ensalada ($ 1.800), en una plato tipo bol, contundente y exquisito; lechugas, espinacas, zanahorias, tomates, con una pasta de atún abundante, mas otras cosas que no me acuerdo. Buen tamaño para ser medio plato. Parece que el plato entero es un poco excesivo.
Antes pedimos una sopa cada uno; la mía fue de champiñones ($ 900); espesa, exquisita, temperada.
Nos tomamos un café expreso con salsa de chocolate, que me sugirió probara Felipe; exquisito ($ 1.150).
Bueno, un excelente lugar para pasar a almorzar y terminar hojeando libros que si uno se tienta puede terminar comprando. Sin duda una alternativa para ir solo o acompañado a tomarse un café bien conversado.
Pienso que este formato es una muy buena idea que podría ampliarse y quizás propagarse si sus dueños, que no me tincan muy comerciantes, se hicieran acompañar de empresarios que no barrieran el logro atmosférico de este agradable espacio de conversación, degustación y cultura.
