Celebrando nuestro primer año de matrimonio, hace una semana fuimos con mi esposa al restaurant Coco Loco de Valparaíso (Blanco 1781, pisos 21 y 22). Fuimos, como otras veces, siguiendo su cocina de calidad y buena atención. Desgraciadamente sólo queda esto último. Comimos un risotto de mariscos que parecía recalentado, y una corvina con salsa de espárragos sin mayor gracia. El problema, sin embargo, no fue la comida: al momento de pagar, el restaurant no tenía operativo el sistema de pago con tarjetas de crédito y débito, sin que los clientes supieran, y por el contrario, asumiendo como responsabilidad del cliente no tener otro medio de pago. Con mi esposa estuvimos retenidos durante casi una hora, tiempo en el cual, de tanto intentar que funcionase el sistema, las tarjetas se bloquearon.
La persona responsable de este desagradable incidente fue su administradora, quien jamás reconoció la responsabilidad del local ni se mostró dispuesta a buscar una solución en conjunto, ni menos a proponer una salida sin que el resto de los comensales se diera cuenta. Tampoco quiso aceptar nuestra sugerencia de pagar al día siguiente la cuenta, pese a reiterarle que eramos clientes, de haberle dado todas mis referencias para confirmar el pago, señalarle la importancia del día, y aún teniendo que soportar como menoscababa mi credibilidad sin argumento alguno. Después de todo este rato finalmente se convenció "y nos liberó", sin pedir disculpas por el mal rato y asegurándose de darnos un comprobante bancario donde salía el nombre de la sociedad propietaria, rut y número de cuenta donde debía depositar lo adeudado a primera hora. El pago lo realicé la misma noche con otra cuenta, enviando el comprobante a la persona indicada vía correo electrónico. En respuesta, la señora ni siquiera se tomó la molestia de acusar recibo.
Puedo comprender que un restaurant que se dice prestigioso un día pueda no estar a la altura de sus pergaminos. Lo que es inexcusable es que se maltrate a los clientes de la forma como la administradora del Coco Loco Valparaíso lo hace, excusándose en que "la caja debía cuadrar". Si aún así desea intentar comer en el lugar y quiere evitar maltratos, le recomiendo que lleve suficiente dinero en efectivo o se atenga a las consecuencias.
No está demás decir que Coco Loco perdió un par de clientes.
