Tirúa (duc in altum).
Siguiendo en la línea de un post de Isidora en los días siguientes al Terremoto, ya con otro ánimo, tuve la suerte de pasar Semana Santa en Tirúa. La foto corresponde al Desayuno del día Sábado Santo, en el que participé de la "logística": comprar mortadela lisa y manjar -y me anduve perdiendo, de hecho- para el desayuno con que las comunidades rurales católicas iniciaban un encuentro.
En lo pertinente, porque la significación comunitaria quizás excede o me excede con creces, lo que me impresiona, es cómo el aspecto comunitario hace la comida, comida. Entre la alegría de la gente que se encontraba y los relatos impresionantes de una ola que se metió en el pueblo y arrasó con todo.
Se ve una botella de coca-cola, porque a mí el café o el té o la leche no se me da tan facilmente, así que el que quería podía untar el sandwich ya no en líquido caliente sino en el light. Yo lo intenté y no estaba mal.
A lo que voy, es que a veces yo olvido que la buena vida es más Vida. Y que hay que tratar de acentuar esa parte, por sobre otros aspectos que así confrontados resultan un detalle.
Eso es. Buena semana. Slds. r.