Patio Bellavista parte II: Caburga...
... Ya que quedamos con gusto a poco, pasamos a otro local: el Caburga.
El local es bien acogedor, tiene un aspecto rústico y mesas con sillas y también sillones por si quiere mayor comodidad. Tenían música en vivo que pasaba por repertorios de rock latino y baladas en inglés. Se puede fumar en la terraza y en el interior.
Mi novio pidió un vodka tónica ($4.900) y yo un frambuesa sour ($2.900). Para picar, pedimos quesadillas rellenas con queso, tomate, camarones y cebollín ($3.500). El vodka esta vez venía con una tónica en botella individual; mi frambuesa sour fresquito, delicioso; y las quesadillas muy ricas, acompañadas de guacamole y crema agria.
En total, $12.000 con la propina.
Buen local, nos gustó.
PD: Vale decir que el volumen de los amplificadores del cantante estaban a buen nivel, porque se permitía una conversación que no requería gritos. Bien!