La Sal Restaurant

Escrito por: heinrich
F01 Ene 2010
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Hace tiempo que no escribía acá, pero lo que me paso el sábado merece que se escriba, y ojo que no solo he escrito cosas malas.

El sábado con un grupo de amigos salimos a comer y fuimos al restaurant Las Sal, un ambiente agradable. la comida rica sin pretensión, la carta de vinos pobre, si el garzón si saber como se sirve ni en que momento traerlo, el vino llego a la mitad de la comida, descorcho el vino a lo lejos para mas remate lo dio a degustar a alguien que no lo pidió.

Otra decepción fue la carta de postres, hay dos formatos una a la carta y otra buffet. La carta tres alternativas, panqueque celestino, crema catalana y helado; buffet mouse de chocolate, bavarrua, tarta de frambuesa fuente de fruta. Un restauraran no puede tener una carta de postre tan limitada y pobre. Y como para rematar, quedamos solos en la terraza y para nuestra sorpresa cuando algunos de los comensales estaba en el postre, los garzones comenzaron a retirar las mesas que estaban en la terraza, málteles, apilando sillas y moviendo mesas, de muy mal gusto, al hacer el reclamo solo estaba el jefe de garzones y le excusa es que hay un compromiso con la municipalidad para cerrar la terraza a las 00:00, ¿ no es mejor decir eso a los clientes e invitarlos a pasar a los comedores interiores para seguir consumiendo en ves de sacar todas las cosas que están alrededor?

La cuenta Salió $70.000 por cinco personas y eso que tenia 25% descuento de club de lectores, lo encuentro caro para todo lo vivido.

No tengo problema con pagar una cuenta así siempre y cuando lo que recibo a cambio sea bueno, agradable. Este no fue el caso. Conclusión no RECOMENDABLE

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Heinrich

Comentarios:

Era muy asiduo de la Sal pero los precios se han disparado m/m lo que se descuenta de la tarjeta del Mercurio y un poquito mas, de echo si no la tienes sale muy caro por lo que ofrecen, mala política, se nota por la poca cantidad de gente en comparación a tiempo atrás , siempre estaba lleno hmmm

He ido varias veces a la Sal, pero sólo a la hora de almuerzo del domingo. Siempre sé a lo voy (lo mismo me pasaba con el Barros Jarpa de Vitacura). Es un restaurante, a mi parecer, sin muchas pretensiones y la comida es medianamente buena. Ahora, encuentro el colmo lo que te pasó con el tema del retiro de las mesas y la incompentencia del garzón que los atendió. Además te salió muy cara la cuenta y la comida que te sirven no es mala, pero tampoco lo vale. Que lamentable que una apuesta segura se convierta en una mala experiencia. Mejor suerte para la próxima vez. Saludos.

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