GRAN SORPRESA GRAN...
Asi es, la verdad es que uno suele llevarse de vez en cuando alguna que otra sorpresilla en los viajes a regiones y asi me ocurrio en mi ultimo viaje a Talca.
Es curioso como pensamos algunos Santiaguinos, y digo esto porque en muchas ocasiones hablamos con mis socios del club de Tobi ( siempre alrrededor de un buen vino y suculentos picoteos ) de la pobre oferta gastronomica de la que disponen varias ciudades de nuestro pais.
Aquello no resulta ser del todo cierto, todo en el contexto de que pareciera que en regiones la gente esta cada dia mas exigente y con mas expectativas a la hora de salir a comer afuera. Hoy por hoy a la hora de animarse a poner un Restaurante en ciudades chicas o relativamente chicas, hay que tener claro que los comensales ven el gourmet y al menos la presentacion de un plato debe estar a la altura de lo que ven todos los dias en television.
Talca no es la excepcion a la regla y cuando tuve que ir hace unos dias me lleve una grata sorpresa con un local que por lo que pude saber es relativamente nuevo, LOCOS DE ASAR, un boliche agradable a la vista, con un trabajo en madera que la verdad sorprende y solo se suele ver en Argentina y a veces en algunos pueblos en el sur, hay que destacar los detalles en piedra, que por lo poco y nada que se de esos temas debe ser piedra laja o alguna de sus variedades, la decoracion es delicada y acogedora, todo bien.
La comida es otro tema, a pesar de que la especialidad es carnes a la parrilla y eso no es representativo de platos muy elaborados, hay que reconocer que en mi vida, ojo, en mi vida me habia comido una carne como esta, el bife chorizo de 500 grms. estaba increible, jugoso, en el punto preciso y para mi que pesaba mucho mas que eso por que soy bueno para la carne y no pude terminarlo. No probe el asado de tira de mi amigo Andres pero el me dijo que estaba mundial igual que el Casa Donoso Carmenere que una señorita muy amable y guapa nos recomendo.
Todo bien hasta el postre, pero no todo puede ser perfecto, poca variedad, demasiado sencillo y desentonan un poco con la calidad del local, deberian ponerle mas empeño a mejorar eso. En fin, un celestino con helado siempres es bien recibido. Ah, mencion para la Cava de vinos que hay en el segundo piso, me parecio espectacular y tenia un meson de degustacion imponente.
Resumiendo, un lugar que vale la pena conocer para los que como yo viajan de vez en cuando a Talca.
Nota : 6.8 ( seria 7 de no ser por los postres )