Panchita
Santiago es la segunda ciudad con mas restaurantes peruanos en el mundo después de Lima, y eso se nota. No hay barrio que no tenga un restaurant peruano, hay casos como en Principe de Gales que de 10 restaurante en dos cuadras, 7 son peruanos. En Santiago nos hemos acostumbrado a comer comida peruana en restaurantes de todo tipo, desde los mas humildes en el centro, hasta los mas elegantes en Nueva Costanera. En esta ultima linea es que se encontraban los de Gastón Acurio, pero en general, con una oferta que se alejaba de lo que la mayoría de los restaurantes peruanos ofrecían en Chile: lomo saltado, ají de gallina, seco de cordero, anticuchos, tacu tacu, arroces. Da gusto que con el Panchita haya decidido entrar de lleno en lo que la mayoría de los restaurantes en Chile ofrecen como comida peruana.
En el Panchita los platos son grandes y contundentes, los precios no se quedan atrás. Partimos con el Piqueo Doña Pancha ($21.800) con un papa rellena exquisita, choclo a la huancaina, causa limeña, anticucho de corazón, chicharron de chancho, un tamal de choclo verde y alcachofa, contundente, sabroso, rico, bien preparado. Seguimos con los anticuchos de pulpo, perfectos! nada que decir, sabrosos, blanditos. De fondo, probé el arroz con pato ($26.800), exquisito, bien preparado con el cuero crujiente, el bistec a la sartén ($16.800) que es una versión de nuestro Lomo a lo pobre, pero con papas hilo. De postre unos picarones, que estaban mortales.
En resumen, muy buena cocina, pero no estoy seguro que los precios tan elevados esten justificados, ya que en Chile hay varios buenos restaurantes que se le acercan en este tipo de comida peruana, que no cobran como el Panchita. En los otros casos, como La Mar, no tiene competencia, y puede cobrar mas caro, aquí, no.