IN FRAGANTI, malo ... sólo eso.

Ni pensar en volver al In Fraganti, fue mi segunda y última visita. La primera vez tomamos rico vino, bien atendido y comimos un rissoto y una pasta que estaban acorde al precio. Nuestra última visita fue el viernes recién pasado, el local es muy agradable, la atención perfecta pero la comida nefasta como para pararse e irse. (Por no arruinar el momento no lo hicimos)

Junto a un rico vino (que no es gracia de ellos) pedimos sorrentini y atún; el sorrentini estaba salado al nivel de necesitar agua para pasarlo, increíble, parecía hecho por un novicio, además el plato estaba frío, tema que para mi en un restaurant de pastas es fatal. Por otro lado, el atún demostró como se puede espantar a los comensales de un local, la presentación era pobre, envuelto en una masa que se veía recocida con una hojas verdes recalentadas y el atún mismo (dos trozos grandes, raro para ese tipo de pescado) venía absolutamente cocido, es decir, se les había pasado el recalentado en microondas. En fin, el plato más caro de la carta era para tirarlo a la basura.

"No arruinamos el momento reclamando pero si nos dejó mal sabor el momento". No le veo posibilidades de mejorar y les recomiendo no ir.