La Barquera, Enjoy Viña del Mar, atención cada vez peor

Escrito por: alexis guerrero
F01 Ene 2010
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Como una cadena como Enjoy no se preocupa del prestigio de los establecimientos que la componen?

Impresionante la decadente atención de garzones en La Barquera, muy de capa caída y con una absoluta falta de control o supervisión de un Maitre realmente dedicado y entendido en la materia.

Mesas atendidas a lo compadre, si ven un famoso en el local, hay al menos tres garzones de punto fijo para esa mesa, mientras los demás languidecemos esperando el siguiente plato y al final mas de media hora para que me traigan la cuenta.... Una cuenta que no es barata y una carta que claramente podría ser mejor.

Se suma a la molestia una creciente plaga de moscas

Personalmente y pese a ser cliente habitual de los restaurantes de Enjoy, al menos a La Barquera no vuelvo.

 

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Alexis Guerrero

Comentarios:

... en que una mesa de pura gente "del rubro", éramos cuatro, terminamos revolucionando tanto al servicio del restaurant que acabamos atendidos por puro personal del Savinya. El bartender tiró la esponja con nosotros y los chicos de salón, ni hablar. Tampoco habia maître esa vez, recuerdo. A la tercera devuelta de tragos empezó el desastre. Y no nos estábamos haciendo los lindos ni nada, simplemente exigiendo la calidad implícita en un lugar como ese. El episodio nos terminó dando vergüenza, a decir verdad, tanta gente dando vueltas alrededor nuestro.

Buena ubicación, linda vista y todas las condiciones para ser un establecimiento de calidad, pero se caen en algo tan básico como la atención, la buena disposición, que perfectamente puede controlarse con el trabajo de un Maitre experimentado. ¡cambien al bartender por Dios! Concuerdo también en la buena atención del personal de Savinya. ¿Alguien puede recomendar un buen local en Viña del Mar de ambiente informal donde almorzar y ir a tomar un buen trago y donde además la atención sea realmente dedicada? Gracias!

Tuve la misma desagradable experiencia el pasado domingo. Pero además la calidad de los productos que utilizan dejaban bastante que desear. Gracias por poner el tema Ale BLOG DEL SER HUMANO: PSICOLOGíA y más

Durante 40 años de viajes de negocios,he observado que los garzones no tienen escuela alguna,salvo honorables excepciones.Contaré un episodio de un final a risotadas de todos los involucrados. Invitado por un gerente de ventas visitamos un buen local de Temuco.Al entrar alcanzo a escuchar " ahí viene el caballero mañoso ".Sentándonos a la mesa viene un acomedido y simpático garzón.Le pido que vengan a la mesa los garzones desocupados y también el jefe que estaba tras la barra,endilgándoles sonriente el siguiente discurso: escúchenme,muchachos:yo no soy un viejo mañoso.En mi visita anterior aconsejé al muchacho que nos atendió,a título de consejo,que no tomara mi vaso de Bloody Mary con los cinco dedos por la parte superior,en la cual el cliente pone los labios para beb

Es impresionante como en pequeños detalles notas cuando un garzón tiene buena escuela. En mi modesto itinerario hasta el momento puedo destacar la atención del personal de San Marco en Viña del Mar y de un desaparecido pero inolvidable "Plato Greda", en Granizo - Olmué.

Nopes Alex, que en el San Marco los mozos se hacen los simpáticos mientras te atienden, pero varios jotean a las señoras y pelan a los clientes cuando están más en confianza entre ellos. Me hubiera gustado pensar que era hecho aislado, pero luego de verlo más de una ocasión quedó claro que no era el caso... Independiente que la comida pueda ser bien preparada y los ingredientes seleccionados con pinzas por su dueño... Saludos

Respecto a la recomendación de un local, por 8 Norte hay uno informal para comer y con buen surtido de cervezas, simpáticas mozas a la hora de almuerzo (aunque alguna pueda confundir una tónica con Ginger Ale como en varios otros lados), pero de que la atención es dedicada, lo es...

Adolfo, como dices a muchos mozos les falta escuela, si bien no se puede echar a todos en el mismo saco, tienes razón, de los que se dedican a esto como profesión, son contados los que se salvan en cuanto a conocimiento y disposición. Tu historia me recordó un día que andaba con antojo de un buen corte de carne a la parrilla... caminé varias cuadras para llegar al local que me tincaba y justo antes de entrar, a través del ventanal veo a uno de los mozos hurgueteándose la nariz con ganas, mientras (creía que) nadie lo veía. Luego se da vuelta, toma una carta y se la entrega a los comensales de una mesa. Ese día terminé comiendo sushi...

Y siguiendo con las anécdotas... Anoche en un conocido y concurrido pub porteño, pedimos varios ron havana incluidos con la entrada, un par eran de "7 años" (pagando la diferencia), el mío "Añejo Reserva" (nombre comercial para el de hasta 5 años). Cuando los traen, el Añejo reserva en vaso sólo con hielo venía muy turbio, casi como chicha, aunque no había problema con el aroma. Al consultarle a la joven moza, comparándolos con los demás en la mesa, concluyó que tenía tal tonalidad por no ser de 7 años como los otros...(!) Lo enviamos de vuelta, donde la bartender lo examina con cara de extrañeza, abre botella nueva para servir otro y lo envía junto con las correspondientes disculpas. Final feliz. Probablemente el local no tiene la culpa de los productos que ofrecen en esto

En noviembre,cambiaron la carta(algunos platos). Lamentablemente sacaron algunos buenos como la entrada de machas gratinadas(puerto madero en la carta), y la cambiaron por una ensalada con queso mozzarella. La lasaña que ofrecen con salsa boloñesa, es algo ácida (como de tarro) y la sirven en unos recipientes pequeños cuadriculados,en donde uno se siente comiendo arriba de un avión. El solomillo que ofrecen es algo seco,así como unas brochetas de carne y pescado que estaban algo crudas y sin aliño(sal). Todavía piensan algunos chef que incorporando ciertos ingredientes poco conocidos o nombres franceses van a impresionar y eso les da la libertad de entregar un producto mediocre y caro.

Las veces que hemos ido a la Barquera, hemos tenido una buena atención. Picando más fino, la verdad tiene una carta bastante pobre, de calidad regular, que no tiene relación con lo que "debiera ser" (grupo enjoy (que en todo sentido la preocupación por el cliente es MALíSIMA, hotel+casino+restaurant). Un gran negocio con muuuuuy poco cariño

Nada mejora, hemos ido en familia nuevamente y se confirma lo publicado. Aunque hables con el administrador, que amablemente te "soba el lomo", ofrece disculpas y promete enmiendas, sigue siendo mejor la atención en una dieciochera ramada. No vaya.

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