La Buona Mezza - Especialidad Pastas - Viña del Mar

La comida es buena, pero tengo impresiones encontradas con La Buona Mezza respecto a la atención. Sigue leyendo más abajo...

LA COMIDA

Este restaurant italiano tiene una carta enfocada en las pastas (o si se quiere, comida italiana), aunque también ofrece carnes,  pescados y menú diario (días de semana) a precios asequibles.

La sugerencia del día en mi última visita era pasticelli relleno de camarones ($4.200) una variante del plato de la carta, con espinacas, champiñones, camarones nacionales y queso fundido, pedidos con salsa de nueces (bechamel).

El plato estrella de este local es la tripasta ($4.200), gnocchi, raviolli y panzotti, con salsa a elección, la última vez pedidos con salsa al burro (mantequilla, aceite de oliva).

También alguna vez pedí otros platos con salsa putanesca, Bolognesa y Rossini (Alfredo+Bolognesa) aunque debo decir que no me mataron como la bolognesa de la Piccola Italia en sus tiempos mozos.

Si opta por el menú diario ($2.200) incluye una sopa, el fondo que la muchas veces es alguna pasta y el postre. Si prefiere pedir a la carta, notar que el precio es por la pasta y no por la salsa como en otros lugares. Las pastas son artesanales y hay unas 10 variedades, al igual que las salsas (alfredo, al pesto, al burro, bechamel, nueces, de mar, putanesca, pomodoro, etc.).

Las pastas son preparadas y servidas muy rápidamente, de lo que se deduce que están listas para cocer, lo cual se agradece, pues el tiempo siempre es limitado.

Los jugos naturales son preparados de fruta natural, no de máquina ni de pulpa y a muy buen precio ($950).

UBICACION y ESPACIO

Está algo oculto, en 3 poniente pasado 5 Norte, pero de todos modos tiene buena afluencia principalmente de oficinistas y ejecutivos de las inmediaciones. Tiene buen espacio para hasta unas 50 personas. Ambiente único: No tienen área para fumadores ni terraza.

LA ATENCION

Como indicaba al inicio, en este punto tengo impresiones encontradas: En un principio me gustó bastante por las preparaciones, pero hace algún tiempo dejé de ir, pues la atención de los mozos no fue la mejor en más de una ocasión.

Incluso la última vez que fui, me senté en una mesa que estaban desocupando y al traer el pan le solicité al mozo que me cambiara el pebre que habían dejado los anteriores comensales; como respuesta el mozo me indicó que para qué, si los anteriores no la habían tocado (aunque claro, él no tenía como saberlo ni demostrarlo y mientras esperaba yo vi que SI lo habían usado). En realidad el pebre no me importaba, pero para evitar una discusión, no exigí que me lo cambiaran, no toqué el pan ni el pebre, la propina fue proporcional al nivel de la atención recibida, y dejé de ir por meses... hasta ahora que volví nuevamente.

Esta vez me atendió una niña que no había estado antes, muy atenta y preocupada, justo lo contrario de los otros 2 mozos de antes. Ignoro si el otro mozo que faltaba continuará o estaría con el día libre. En fin, para una próxima visita, ya sé quien quiero que me atienda.

A FAVOR: Buenas pastas, buenos jugos naturales, no se fuma, buen espacio e iluminación, precios razonables.

POR MEJORAR: No aceptan VISA, atención variable, sin música.

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