In Fraganti

Fuimos al In Fraganti el fin de semana. Queda en el Paseo El Mañío en Vitacura donde estaba el Giulia. No teníamos reserva pero no fue problema porque había poca gente. La atención muy buena y preocupada en todo momento, la decoración, mantelerería, vajilla y todo impecable...el pan caliente: punto  favor... , también a favor el detalle de la rodela de limon para el agua mineral...pero las salsas para picar más bien insípidas....el  pisco sour... aguadito, la entrada de cebiches... sin limón!!!, y la cocina... la verdad... como que no impacta. Las pastas en su punto pero las salsas cargadas a la sal. La carta tiene algo así como 6 opciones por cada tipo  y los postres la verdad es no impresionan, así es que no pedimos. Una lástima... pensamos que era mejor.