Cocoa... con gusto amargo
Fuimos cinco amigas a comer al Cocoa en víspera de feriado (21 de mayo). Pedimos tres tacu tacu de camarones, un lomo saltado y un plato de pasta, para la amiga indecisa del grupo, que al momento en que ordenamos, le pidió al mozo un par de minutos extra para decidir. Partimos con unos tequeños que estaban bien y llegaron dentro de un tiempo razonable. Pero cuando se acabaron comenzó una interminable espera por el plato principal, mientras veíamos desfilar los platos de comensales que habían llegado después de nosotras.
Cuando llevábamos cerca de 25 minutos de espera le preguntamos al mozo qué pasaba. La respuesta fue insólita: “como su amiga se demoró en pedir, la orden de toda la mesa entró después a la cocina y por eso se ha demorado más”.
Diez minutos después de esta impresentable explicación llegaron sólo la pasta y el lomo saltado. La comida estaba semi fría y el lomo insípido. Los tacu tacu llegaron casi 10 minutos después, sin mediar ninguna explicación de parte del mozo. Y francamente, eso no era tacu tacu. ¡Se les olvidó mezclar el arroz con los frijoles y los camarones! Era un arroz pegado, recubierto por una costra de algo que deben haber sido los porotos y, al lado, cuatro camarones decorando. Todo bien reseco y frío. Definitivamente, un desastre este lugar.