¿De dónde viene y cómo es la carne que comemos los chilenos?
Luego de la polémica que se produjo hace un par de semanas con un cargamento importado desde Brasil, surgieron dudas acerca de la procedencia de los productos cárneos que aquí se comercializan y los procesos a los que ellos se someten al ingresar al país.
Según cifras de la Odepa, Chile es un gran consumidor de carnes rojas, considerando que en promedio –aproximadamente- se comen alrededor de 25 kilos anuales de carne bovina por habitante. De esta forma, si bien hay más de 120.000 productores nacionales que cubren 200 mil toneladas de producción anual, ésta no alcanza para cubrir el consumo per cápita de los chilenos.
Es por lo anterior, que Chile comenzó a importar productos cárneos de países vecinos y consultamos a una de las cadenas más grandes de comercialización de carnes a nivel nacional, “Doña Carne”, para saber qué porcentaje se vende a partir de producción nacional y cuánto desde afuera. Según cifras internas de la compañía, el 35% corresponde a vacuno nacional y un 65 % corresponde a importaciones, lo cual se divide en un 35% de internación desde Paraguay, 20% desde Brasil y un 10% de Argentina.
Respecto a la calidad de los productos, desde “Doña Carne” comentan que la de Brasil y Paraguay es muy similar pero, la duración es distinta. Desde ambos países, se da por vacío y exclusivamente por procesos, de esta forma, Brasil posee una durabilidad de 90 días y Paraguay 120, respectivamente.
En tanto, la raza que ocupan en ambos países (Brasil y Paraguay) es la misma, los Cebuinos, que soportan climas tropicales, por lo que se adaptan a altas temperaturas y se comportan bien frente a las enfermedades que suelen haber. Por otro lado y en particular, Paraguay ha mejorado la calidad de su carne, ya que está cruzando animales de distintas razas, por ejemplo, de Cebú con Wagyu. En el caso de Argentina, la calidad es muy buena pero, desde “Doña Carne”, comentan que es muy alto el valor para ellos y su enfoque principal, es el precio final que tendrán sus clientes. Sin embargo, si obtienen buenas ofertas, las consideran dentro de sus compras.
Finalmente, desde “Doña Carne” afirman que el procedimiento de revisión de cualquier cargamento de mercadería, independiente de su procedencia, comienza en la recepción del camión y se encuentra presente su área de control de calidad y la de proveedor. Se revisa la temperatura que debe estar en promedio 0ªC , más el termógrafo que viene dentro del camión, el cual especifica la temperatura con la que transitó la mercadería. Luego, se procede a revisar un porcentaje de cajas de variados cortes y con esa información, ya están las condiciones para recibir o rechazar la mercadería.