Experiencia cultural y culinaria en Lima
En viaje de trabajo, me tocó estar en Lima, Perú, invitada a almorzar al restaurant Huaca Pucllana, en el barrio Miraflores. El lugar impresiona desde que uno llega, ya que se encuentra ubicado casi dentro del centro arequeológico Ruinas de Pucllana y con vista a este centro ceremonial administrativo de la cultura de Lima, que data del siglo V d.c. Es increíble encontrar este tipo de sitios arqueológicos en medio de la ciudad y, además, almorzar en una terraza cómoda y fresca con vista a las ruinas. Dicen que de noche también se disfruta la vista, ya que las ruinas tienen una iluminación que ambienta.
La comida es deliciosa. Por supuesto que como extranjeros, pedimos los platos más típicos: el cebiche que estaba maravilloso, un poco más picante que lo que acostumbramos a probar en Chile, pero delicioso; el tiradito estaba supremo y el pulpo grillado realmente rico. De fondo pedí un atún sellado, que estaba sabroso pero un poco crudo para mi gusto, con acompañamiento de Yuca frita. Y el postre fue el broche de oro: Mangos frescos, deliciosos, sabrosos, acompañados de unos rollitos de masa filo rellenos de pasta de lúcuma. Exquisito todo!
Y si les toca viajar a Perú, les recomiendo que en vez de tomar solamente pisco sour, prueben la chicha morada: nada que ver con nuestra chicha, es un trago que se prepara en base al choclo morado, pero muy, muy rico. Gran experiencia.