Viñas de Grupo Belén son las primeras en lograr Sello de Eficiencia Energética
La certificación, entregada por el Ministerio de Energía, reconoce los esfuerzos de empresas líderes en el desarrollo de medidas proeficiencia energética y que han definido como un ítem central en su organización este tema.
Tras haber sido el primer holding vitivinícola en conseguir el nuevo Código de Sustentabilidad de Vinos de Chile, las viñas de Grupo Belén –Morandé, Vistamar y Mancura– vuelven a obtener un nuevo reconocimiento en esta área, entregado por el ministro de energía, Jorge Bunster. Se trata del Sello de Eficiencia Energética, instancia creada por el Ministerio de Energía y que se enmarca como pilar fundamental dentro de la Estrategia Nacional de Energía 2012-2030, siendo así las primeras viñas en obtenerla dentro de un total de 22 empresas reconocidas.
La idea de este sello, creado en 2013, es reconocer e identificar a las empresas líderes en el desarrollo de medidas que apuntan a la eficiencia energética, definiendo como su política central este ítem, por ejemplo, reduciendo costos energéticos, aumentando la competitividad y bajando la emisión de contaminantes.
Algunos beneficios directos de este sello son la postulación de anteproyectos de inversión en eficiencia energética por $ 8,5 millones, además de becas de 100% de cobertura en arancel en cursos de capacitación que otorgue la Agencia Chilena de Eficiencia Energética.
Durante el presente año, Grupo Belén –el brazo agroindustrial de Empresas Juan Yarur– ha desarrollado el factor de la sustentabilidad de manera transversal en su estructura de trabajo, incorporando herramientas como medición de huella de agua y de carbono, por lo que este nuevo logro (de dos años de vigencia) se suma a la integral visión humana y ambiental con que se ha abordado este tema.
Por lo mismo, el proceso para obtenerla significó principalmente continuar con iniciativas ya establecidas, además de comprometerse con la eficiencia en el largo plazo, buscando alternativas de mejora año tras año. En este sentido, algunas prácticas han incluido: conocer el consumo de maquinaria y reemplazarla por modelos de mayor eficacia, desarrollar programas de eficiencia energética, instaurar este concepto en la toma de decisiones estratégicas y promover una cultura afín al interior de la empresa.
En cuanto a ejemplos específicos, destacan los siguientes hitos: incorporación de paneles solares para calentar el agua de duchas y casino, uso de cajas de cartón con un 66% de material reciclado, máquinas de envasado y etiquetado de mayor eficiencia, uso de botellas Ecoglass, instalación de luminaria eficiente y extractores eólicos, además de charlas sobre eficiencia.
