Dos maestros del saber vivir para una trilogía inolvidable en el Hotel W
Roland Barthélemy, el mayor maestro quesero a nivel mundial, y Jean Paul Bondoux, chef de chefs, sorprendieron con sus propuestas gastronómicas.
El 29 de noviembre, Noso, el restaurant del W, fue testigo de una inolvidable experiencia gastronómica. Jean Paul Bondoux, después de una deliberación creativa con Roland Barthélemy, propuso con su equipo del Noso un menú consistente en 3 platos salados, su trilogía de quesos, con dos postres que también incluían quesos de gastronomía.
El equipo del Noso tuvo el apoyo de la Escuela del Queso Santa Rosa, que había preparado un maravilloso mesón con los quesos más famosos de Francia.
Los pocos y selectos invitados pudieron disfrutar así de una propuesta creativa y sorprendente, que reinterpreta grandes clásicos de la cocina francesa. Asistió al almuerzo un selecto grupo de personas vinculadas a la actividad vitivinícola y a la gastronomía.
Los invitados pudieron degustar Crèpes con champiñones en salsa de queso Comté, un queso de alta montaña, seguido de Ostras en salsa de Brie Coeur de Lion, y finalmente, clásicos medallones de ave con deliciosas morrillas del sur y salsa de queso Beaufort. De postre, el chef sorprendió con un Granité de cerezas con mousse de queso Chavroux.
Y finalmente, un Diplomate al Roquefort Ile de France, un elegante milhojas que, en su dulzura, conservaba aún un sutil toque del carácter caprino del queso fresco Chavroux.
Se acompañó este verdadero banquete con mostos de la viña Rothschild que agregaron sutileza y elegancia en sus maridajes. La simpatía casi traviesa de ambos maestros abrió un espacio de alegría e informalidad que todos los invitados disfrutaron.
Roland Barthélemy, gran maestro quesero con Jean Paul Bondoux, chef de chefs Bondoux, “enfant terrible”, como un niño travieso, terminó “decorando” a los invitados con su lluvia de azúcar flor, sin querer queriendo, cuando le dio el último toque a su postre de Milhojas al Roquefort.