Chile país de Chanchos!

F25 Dic 2017
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Mirar para el lado no tiene nada de malo, es algo natural, quien no ha pegado una miradita –o mas de una- cuando va caminando por la calle, sobre todo ahora que el esquivo Verano comienza, y aparecen los días mas calurosos, y la ropa más liviana. Ufff, el verano... Mirar no tiene nada de malo, o eso es de lo que me autointento convencer para aplacar mi esencia culposa. Lo malo es cuando se pasa de la miradita veraniega a derechamente la obsesión por tener algo que no se tiene.

Ahora, para que estamos con cosas, esto es parte de la esencia del ser humano, pasa en todo ámbito. Si uno mira a nuestros países vecinos, también pasa esto esto de mirar para el lado, de compararse, de querer lo que el otro tiene, es parte de la idiosincrasia de cada país, hay que tenerle mala a alguien. Nosotros con los argentinos, los peruanos con nosotros, los españoles con los franceses, los canadienses con los gringos. La lista es interminable, y no se saca nada con intentar negarlo, es así. Que sería de Evo sin nosotros, no tendrían a quien echarle la culpa de todo.

Además esto se lleva a todo ámbito, ya no solo es envidiar a los argentinos por que son mejores futbolistas que nosotros, o porque tienen una gran ciudad como Buenos Aires, aunque ahora este bien decadente (no pude evitar decirlo), esto ocurre hasta con la comida. Reconozcámoslo, la obsesión nacional es ser mejor que un parrillero argentino, y asar ojalá una vaca entera el fin de semana, solo para ser mas choro que un argentino.

¿Pero por qué esta obsesión con la carne de vaca? Aquí es donde nos sale todo el provincianismo que llevamos dentro que mira todo lo que no tiene y lo quiere lograr a cualquier costa. Si miramos nuestra historia gastronómica, nuestra carne no es la de vaca, es la de chancho. Ahí es donde tenemos tradición y maestría, aquí es donde hemos inventado preparaciones que son únicas, como el arrollado huaso, o el causeo de patitas, donde el aliño que usamos para hacer un costillar no se usa en ninguna parte del mundo. Donde buscamos acompañamientos perfectos para cada plato: el puré de palta para el arrollado, o el puré picante para el costillar. Donde hemos bautizado al noble animal que en otros países llaman cerdo, con un nombre único y distintivo: CHANCHO.

Definitivamente Chile es un país de chanchos, solo falta que nos demos cuenta de ello.

Nota: Originalmente publicado en Revista Varietal